Hace unos meses una amiga, que quiero mucho, me comentó que yo le aplico "Ghosting," (hasta la fecha sigo sin entender el verdadero significado de dicho concepto malévolo) A mi manera le ofrecí disculpas, que no era mi intención hacerla sentir mal, que mi vida cambió drásticamente, pasé de ser un adulto contemplativo a un ser con responsabilidades posmodernas: redactar artículos, hacer ponencias, dar clases, ser un godínez y estar en una oficina tratando de entender la diplomacia mexicana. Ella me respondió que yo no tenía responsabilidad afectiva, ni siquiera era capaz de darle un abrazo. Me llevó meses pensar y reflexionar sobre mi mal ante los sentimientos del otro y, entonces, una noche entendí, que cambiar no es fácil. Luchas intentando ser distinto, luchas por salir de lo que te has convertido; de cómo te ven y te entienden los demás, te conflictuas a ti mismo y te reprochas. Todos batallamos esas guerras y pensamos que allá afuera alguien nos entiende, pero no es así, hasta tus amigos más íntimos te reclaman. Te sientes mal porque haces sentir mal a los demás; aplicas un doble mal que se triplica cuando no entiendes nada. Pero esa noche, después de escribir en una vieja libreta y plasmar mis emociones, comprendí que a veces los amigos tienen que crecer separados, para seguir estando juntos.
Para todas las personas que me rodean y me han mandado mensaje y no les he contestado, o les contesto a destiempo, incluso meses, les ofrezco una sincera disculpa, mi corazón está apenado con ustedes, tal vez, sea necesario cerrar estas redes sociales y regresar a las viejas prácticas sociales de la amistad; Sin presiones de la temporalidad anacrónica de los deseos. El tener recuerdos y pensar en mis amigos hace que este lugar sea más hermoso. Por personas como ustedes el mundo es el mejor lugar para coexistir y cohabitar. Mi corazón los escucha.♥️
